Como estoy en el interior de Brasil por primera vez, no estaba seguro de cuál sería la comida típica, dado que siempre viví próximo al mar. Cuando llegué a Rondonópolis por primera vez, percibí que la carne es muy popular. Específicamente, a la gente le gusta cocinar barbacoa, un plato conocido en Brasil como churrasco. En la ciudad hay muchos restaurantes que sirven este tipo de comida, que se llaman churrascarías. La primera vez que lo probé fue en un restaurante, y me sorprendió el tamaño de las porciones. Me di cuenta de que el churrasco es algo que debe disfrutarse con un grupo de personas, para comer y conversar. ¡Qué alegría tenía cuando mis vecinos me convidaron a comer churrasco juntos!
En la residencia donde vivimos, tenemos un patio con una parrilla donde podemos cocinar la carne que todos trajeron. Yo compré dos filetes de bistec, que conseguí en el supermercado después de esperar en una cola por mucho tiempo, porque todos están allí los sábados por las tardes para comprar su carne para el churrasco. Anoten que los precios están en reales, la moneda brasileña, que vale cinco por cada dólar americano, entonces siempre tengo que tomar esto en cuenta cuando voy de compras.
